jueves, 6 de diciembre de 2007

Moteros asesinos o administracion voraz

Como moteros asesinos nos quieren presentar a los amantes del deporte de las dos ruedas en los medios de comunicacion, haciendose eco de las pocas ocasiones en que 4 descerebrados hacen tonterias con sus motos que acaban en tragedia.

Al menos, el otro dia vi en una noticia en television donde se reconocia que 140 muertes de moteros se podian haber evitado, simplemente aumentando las medidas de seguridad enfocadas a evitar muertes de moteros. Lo peor de la noticia, es que decia que el presupuesto destinado a la seguridad del trafico solo deberia aumentarse un 0,5 % para evitar esas 140 muertes.

Es lamentable la impresion que dan las autoridades en materia de trafico de que les importa mucho mas su voracidad recaudatoria, via multas, que destinar ese mismo dinero que recaudan con las multas a mejorar la seguridad de los moteros en caso de que un desafortunado accidente se produzca.

Los verdaderos asesinos son los obstaculos y trampas mortales en calles y carreteras, llevandose la palma los temidos guardarailes, autenticas guillotinas para los moteros.

A pesar de las multiples manifestaciones de moteros durante años solicitando la eliminacion de estas trampas mortales, la administracion hace un simbolico gesto de cambiar un par de kilometros de guardarailes cuando ven que el numero de muertes ente los moteros se dispara, pero parecen negarse a arreglar el problema de una vez por todas.
Importa mas recaudar que proteger la seguridad de los moteros !!! soluciones ya !!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo tambien reclamo una solución a eso y a muchas mas cosas, como pueden ser pagar zonas azules, subidas interminables en los precios de combustibles, las autopistas, que son un robo, carreteras en estado lamentable lejos de las capitales, etc etc etc...para lo cual solo veo una solucion y pasaria por cojer nuestro vehiculo todos y cada uno de los conductores y atravesarlo en todas las carreteras del estado...es una pena tener que llegar a esos extremos